Elsye Suquilanda, Poeta y escritora ecuatoriana residente en Berlín, Alemania

Foto: Walter Trujillo

 

Casi se me infarta de a doble

De ginecólogo, en ginecólogo…
De chequeo, en chequeo,
Abra un poquito más las piernas,
No le va a doler, a ver suavito…
Relájese…

Otra de esas historias,
que no pueden pasar desapercibidas
por el oído humano…

una inflamación pélvica…
para saberlo…
pasaron varias semanas,
con el pendiente…
y por uno que otro doctorcito,
con cada cosa…
Que si está segura que no tiene sida,
Que si el novio no se acuesta con prostitutas..
Que cosas no?
Y de la manera menos apropiada,
Cual carnicero de camal…

Hasta que atinó con el médico y la respuesta correcta…
"Usted tiene una infección pélvica"
que, con desinflamatorios se solucionará…
En un mes…

A ya!!! así la cosa cambia…
Pero esto no es todo,
lo que le tocó escuchar y ver ese día,
A Mirla Azucena…

Bien…
para entonces,
su amado haría arribo de Galápagos esa misma tarde…
Aquí empieza una conversa normal,
De cómo le fue?


Que tal el clima,
Los animalitos,
El medio ambiente, etc…

Las contestaciones no muy alentadoras,
puesto que el clima estaba frío,
demasiado turista,
pero empieza a quejarse del hotel….

En eso se acuerda de algo que guardaba en su billetera,
- Mirla Azucenaaaaa!!!!... me pasas @##$%^% de la billetera!!!

Y que Mirla Azucena,
abre la billetera…

Cae en cámara lenta un pequeño papel rosa,
Hotel las ninfas,
Ruc… tal,
Doña Elsa Eufemia Argüello Tobar,
Valor 2.44 usd….

Mirla voltea su cabeza,
Hacia su amado,
Con un parpadeo intenso en su ojo izquierdo….
Pensó lo peor….,
Ya el corazón se le paralizaba
La cabeza se le hacía grandota,
Sintiendo un liguero cosquilleo en las manos…
Caminaba arrastrando el taco rojo…
Con la boca seca…

Que es esto Alfredo?...
Donde estuviste?,
Con quién estuviste?
De que hotelucho de mala muerte me hablas,
Empezaba a temblar,
El movimiento de su ojo,
Ponía tensa la habitación…

Alfredo que le dice:
- mi amor de eso quería hablarte,
de el hotel donde me hospede, mira aquí tengo la factura….

Mirla Azucena,
se relaja,
se acomoda el moño,
se le empieza a retroceder la película….

por un instante se le pasaron imágenes,
de las preguntas del ginecólogo,
de esos hoteles viejos del centro,
donde se paga por hora el cuartito….

Y ese papelito de que es?
- de una coca cola mi amor…


"Orgía de mariscos"


Sentaditos afuera del restaurante mi playita
Sentaditos como dos calamares de felpa

Eran ya las diez y treinta,
Aquella mañana calurosa y pegajosa

Y el reloj de arena del mundo, en su absurda perseverancia nos devolvía al hediondo útero de una bruja.

De repente una orgía de mariscos nos quería hacer presa de su juego, y en ese momento es cuando sentí tu pie desnudo cerca de lo que llaman el "astro peludo" y…

Oscuridad,
Completa oscuridad…
Fauces, telarañas, langostinos desvelados, capas olvidadas, magma, ceniza, lava incandescente, el astro empezó a emanar un rayo de sal y limón.

No se callaban era un griterío del carajo, tu y yo escuchábamos claramente el quejido de una langostina quién pedía …
¡! Calma a la lucha porque para todos había chucha!!... todo esto empezó a descontrolar nuestros sentidos.

Y la orgía se inflaba y se inflaba hasta la gula y el atracón… seres de todas las formas y edades empezaban a copular a nuestro alrededor… figuras incomprensibles empezaban a emerger del Gran intestino, de la Gran vulva de la Gran ballena orgásmica…

Vi hasta un par de arroces quienes te pedían besos apasionados, querían llegar al fondo de tu garganta los muy cabrones!!... y yo celosa, ya todo era surreal o quién sabe si nos darían agüita de calzón del dueño?


Si, quien sabe, si en medio de tus ansias efervescentes, algún órgano te apostó la vida o te vendió el alma…


Quien sabe, si a través de la orgía interminable, el zafiro de tu boca resucitó la momia más temida de tu sexo…

Aunque a veces temo el no tener alma …
Desde que vi como los calzones de las monjas enclaustradas hablaban entre si…
y de toooodo lo que habían cargado en años, en sus viejas telas de color amarillo tubería vieja…

" En hora buena", explotó el Señor de los Mariscos. Entre tanto vómito y aplauso, los dioses de las playas y el desorden, desenterrarán sus más preciados y luminosos falos, para bañar en semen las barrigas de las brujas. Así, nacerá el orden, por fin…


¡! Jesús en cruz, darán de comer
mariscos alucinógenos ¡!

Nota especialísima:

Este poema fue realizado con Pancho Prado, hermano de mi alma con quien dejamos entrelazar su fina firmeza y surrealista manera de conjugar sus ideas con mi vulgaridad exquisita de la locura….